lunes, 30 de marzo de 2020

La gran cosa

Corre el tiempo, sin sentido
se desvanece en sí mismo
como si no hubiese nada ni nadie para contenerlo
abrazado a esa gracia presuntuosa llamada destino
se esfuma ante una mínima sospecha de razón
clara señal de que nuestra existencia
pende de hilos invisibles
y sería mejor abrigarse en los sueños
de ser posible morar en ellos
quebrando lógicas y algoritmos humanos
sorteando vanos sentimientos
torpes verdades engendradas en quimeras
diestras para justificar montañas de mentiras
material endeble, superficial, absurdo
pero que rige el ritmo de vida de las personas
sobre todo de aquellas que esperan un golpe de suerte
y sólo obtendrán un cachetazo de realidad
si es que son capaces de darse cuenta
de que más allá de sus narices
tampoco hay gran cosa.
S.F.

No hay comentarios: